GOOGLE MIMA AL EMPLEADO

Google  está convencido de que tratar bien a los empleados es la mejor forma de atraer y conservar el talento y, por tanto, de lograr mejores resultados.

Bock ha visitado a España a presentar su libro "La nueva fórmula del trabajo". "La gente con más talento irá a las empresas en las que haya más libertad", subraya.

La revista Fortune ha declarado a Google la mejor empresa para trabajar. ¿Tiene razón?

No hay que creer todo lo que uno lee (risas). Nos esforzamos mucho por ser un buen lugar para trabajar, pero realmente nos centramos más en lo que piensan nuestros empleados que en lo que dice la prensa y los premios que nos puedan dar.

¿Por qué es importante que un empleado se sienta realizado?

En primer lugar porque es la forma adecuada de tratar a las personas. Cuando la gente se siente capaz -empoderada, como se dice ahora- no solamente es más feliz, sino que también vive más años y es más productiva.

¿Ser una empresa atractiva para trabajar está reñido con ser rentable?

Hay dosFORMAS DE GANAR DINERO. Una es crear un entorno donde la gente se siente bien tratada. Si se les da libertad, las personas son creativas y hacen cosas para cambiar el mundo y, de paso, crean una gran empresa. La otra posibilidad es aprovechar que hay mucha gente buscando trabajo, 200 millones en todo el mundo. Así que uno puede crear una empresa donde a la gente se la maltrata, se la quema, y, cuando están quemados, se les despide para contratar a otros.

¿Una empresa que trata bien a sus empleados es más competitiva?

A la larga es así. Las personas con más talento son más móviles que nunca y es más fácil que ellos te encuentren y que tú les encuentres a ellos. La gente que tiene más talento va a irse a las empresas en las que hay más libertad y, al final, como van a tener a gente con más talento, van a ser mejores.

¿En qué medida aumenta la productividad de un empleado su modelo?

En Google no medimos la rentabilidad en dólares. Nos fijamos en si la gente se queda en la empresa, si es innovadora y si da un buen servicio a los clientes.

En el libro dice que los planes de negocio mejor concebidos fracasan cuando los empleados no creen en ellos y propone "un sano escepticismo" sobre la autoridad. ¿Están preparadas las empresas españolas para adoptar un modelo así?

No conozco bien las empresas españolas. En Google nos concentramos mucho para que la gente no tenga tanto poder. Cuando contratamos a nuevos directivos, esto les descoloca, les parece que es una forma rara de hacer las cosas. Pero, cuando se acostumbran, los equipos son más abiertos, colaboran mejor y crean mejores productos.

El modelo que describe no es demasiado seguido en España...

Si esto es así, hay una gran oportunidad para tratar a la gente de forma diferente. Si tú eres el único que pides el consejo de tus empleados, todo el mundo va a querer trabajar para ti y vas a tener a la mejor gente.

¿Qué hace falta para cambiar la mentalidad de los directivos?

Hay argumentos morales y empresariales. El moral tiene que ver con tratar a los demás como uno quiere que le traten. En cuanto al argumento empresarial, en los mercados, si todo el mundo hace una cosa y tu haces algo diferente, tienes ventaja.

¿Cuánto tiempo hace falta para implementar en las empresas esta filosofía?

Vamos a tardar décadas, porque todavía se puedeGANAR MUCHO DINERO tratando mal a la gente.

¿Sois una 'rara avis' o conocéis otras empresas que siguen vuestros pasos?

No creo que seamos únicos. He aprendido mucho de otras empresas. Muchas de las cosas que hacemos no las hemos inventado. Algo distinto que hacemos es utilizar muchos datos científicos, empíricos y experimentar cosas diferentes.

En el libro defiende el pago de salarios diferentes a personas que hacen el mismo trabajo...

Es bueno para la empresa y para la gente. En las empresas se paga un salario parecido a alguien que es hasta 300 veces mejor. No digo que haya que pagar a alguien 300 veces más, pero sí un 50 o un 100 % más. Hay que hacerlo con una base. Hay que ser justo y poder explicar por qué se paga a alguien más.